lunes, 15 de septiembre de 2014

Con solo siete añitos

Pasodoble con música de "Lo siento pisha, no to er mundo puede ser de Cai", de Tino Tovar. Dedicado a los profesores que me han ayudado a ser como soy y a todos los que se dedican al noble oficio de la enseñanza por amor a lo que hacen. Gracias.


Con solo siete añitos
ya me iba dando cuenta que estudiar
sería tan importante
para hacer mi futuro como respirar.
Con 15 primaveras
supe que aquí, en España, el trabajar
se iba haciendo ya imposible,
se alejaba de la realidad.
Y mi ilusión,
llevar luz a casas ajenas,
se mezclaba con el fervor
desatado por los poemas.
Y así empecé
el laberinto de mi mente
hasta que vino un profesor
diciendo "déjame que yo te cuente".
Y me estuvo explicando de forma directa
que pa' levantar este sucio planeta
debía luchar con mis armas de poeta.
Y me puse las pilas para conseguir
que tantísimo esfuerzo
quedase pequeño
tras lograr mis metas,
aunque me hiciera un lío cuando pa' escribir
siempre usara en las clases,
pa' lengua y pa' mates,
la misma libreta.
Recordando esos cursos hoy quiero decir
que sin mis profesores no habría intentado ninguna carrera.
Y aunque no puedo nombraros por educación
pa' no dejar aquí en blanco a quién me traicionó
os llevaré a todos siempre conmigo.
Y sois tan grandes que sois capaces de sacar
a todo un hombre de donde había un niño.
Y así es como os lo pagará la historia,
que pese los gobiernos habrá siempre
mil alumnos que no os borren
de sus memorias.




 

lunes, 1 de septiembre de 2014

Érase una vez...

Aquí os dejo el pasodoble que le he dedicado a mi hermana (y a mi cuñao) por su aniversario de boda. Con música de "Las Muchachas del congelao", chirigota de Antonio Pedro Serrano "El Canijo de Carmona" y con música de Tino Tovar.


Érase una vez
un cuento especial
con su principito y su princesa.
Cuento que empezó
cuando se casó
en Valverde la mejor pareja.
Un cuento nuevo
que empezaba un día de agosto
entre llantos de alegría;
un cuento nuevo
que nunca se acabará
porque se escribe cada día.
Dos amigos no dejan de serlo
si en una iglesia se conceden un "sí quiero"
y aunque sigue la amistad
ya no se puede negar
que ahora sois algo más serio.
Y no hay ningún papel
que jamás pueda deciros
cuando os debéis de querer.
Después de tanto ya
nos habéis dejado claro
que por siempre os vais a amar.
Siempre igual,
nunca os he visto cambiar
y eso os hace diferentes
al resto del mundo.
Seguirá
esta historia sin final,
que tras 12 años aún no habéis tenío' bastante
y seguís sumando a vuestro cuento navidades.