Triste amor eterno

Éste es uno de los que mas me gusta,muy sentido.


Muerte, errante y despiadada,
avanzas con luz y sin sombra
ritmo marcado sin escrúpulos
cenizas dejas por alfombra.
Entraste en mi joven vida
cual daga en agua tibia
con esa prórroga burlona
que ahora a nadie alivia.
Aún mantengo en la memoria
el recuerdo de aquel día
en que el médico nos dijo
que algo por dentro te comía.
Al irnos te volviste a mi
en tu cara dibujada la sonrisa
que indicaba claramente que
por morir no tenías prisa.
En casa me dijiste así:
Para aumentar más mi belleza
cogeré este pañuelo rosita
y me lo pondré en la cabeza.
En verdad no te equivocabas
y con espíritu de luchadora
me dijiste con los ojos rotos
que aprovecharías cada hora.
Fueron pasando los meses
entre penas y alegrías
hasta que tomando tus manos
las noté demasiado frías.
Te quedaba un solo aliento
hablé y dijiste susurrando
que si quería decir algo
que lo hiciese callando.
Se mezclaron las lágrimas
en nuestro último beso
y me noté en tus labios,
de amor me sentí preso.
Hoy he venido a verte
para decirte tras un año
que aún sin tus caricias
me sigo sintiendo extraño.
Allá donde estés ahora
aunque ya no te besaré
quiero que tengas claro
que jamás te olvidaré.